El Ambulatorio Venezuela, situado aquí en nuestro Estado Mérida, se encuentran 7 niños con diferentes edades internados, que llevan su vida entregada a un hospital, ellos fueron abandonados por sus familiares, e inclusive por sus propias madres, quienes al ver, que por el simple hecho de ser niños con deficiencias mentales y psicológicas, los dejan tirados y abandonados.
Así se encuentran Santiago, Cristian, Amable, Jhoan, Jesús, Vicente y José; viven juntos en una habitación, 6 niños varones y una sola hembra, pero ellos, día a día, han sobrevivido y queriendo tener más ganan de vivir.
A veces nosotros no somos conformes ni con nosotros mismos, y somos egoístas, orgullosos y sin conciencia, ya que estos niños y mucha gente con problemas desearían tener éso que nos estorba, tenemos que dar gracias a Dios porque somos personas sin problemas y sin defectos; es por ésto que quiero darle gracias de todo corazón al Ambulatorio Venezuela, que por bondad de esos doctores y enfermeros, a estos niños se les puede sacar una sonrisa y que a pesar de que sufren graves problemas, tienen un Corazón de Oro.
¡Qué viva el mañana!
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